Continúo con el 2º numeral iniciado en el mensaje anterior...
El PRSD ha tenido un comportamiento patético.
Parto aclarando que mi comprensión del funcionamiento y pensamiento político del PRSD es inexistente. Sinceramente no entiendo que significa ser un Radical Social Demócrata y qué tipo de pensamiento político une a sus militantes.
El Partido Radical Social Demócrata o PRSD, es un partido pequeño y da la impresión de que querían que el 5º Presidente de la Concertación fuera de su partido, en razón de una lógica simplista de "ahora nos toca a nosotros", que es un poco irrisoria. El pequeño porcentaje de votos con que cuentan y el limitado número de parlamentarios que militan en su partido les ha permitido negociar cuotas de poder en los Gobiernos de la Concertación, pero jamás han tenido poder para golpear la mesa.
No es mi intención ningunear al PRSD porque claramente el accionar de los últimos días no representa el pensamiento de todo el partido, pero se trata de un síntoma claro de una enfermedad mayor que afecta a la coalición en su totalidad... el cuoteo.
Uno quisiera que la meritocracia fuese el factor decisivo para la formación de los equipos políticos de gobierno, pero no lo es y difícilmente llegue a serlo. De afuera pareciera que hay una pugna constante en cuanto a quien ejerce cuál cargo que hasta cierto punto es mezquina y ridícula. Si el Ministro del Interior es de tal o cual partido, ¿se afecta el ejercicio del poder? No. Al menos eso creo, porque se trata de un cargo de confianza del Presidente y se ejerce conforme a sus instrucciones directas, lo que puede variar es la percepción pública del ejercicio del cargo y por tanto se afecta la popularidad de determinado partido, el único efecto práctico es que del ejercicio de dichos cargos surgen figuras políticas que posteriormente pueden aspirar a candidaturas presidenciales. Ahora, si el objetivo es que la coalición gobierne, en teoría debiera dar lo mismo de cuál partido provengan los nombres que ejercen el poder, pero no es así y las sucesivas disputas y envidias que se van generando causan un espectáculo penoso y patético que en buena medida justifica el creciente número de personas que manifiesta desprecio hacia la política.
¿Qué pasó? acaso el PRSD quiso castigar el desaire que le hizo el resto de la coalición con la "primaria" en la que participó su actual presidente (al que se suma otro penoso incidente, con los insultos que Escalona le dirigió a Gómez), o peor aún, ¿quiso el PRSD adquirir protagonismo y peso político inclinando la balanza de poder del Parlamento?. Creo que hay un poco de ambos, el PRSD no tendrá peso específico como oposición a un Gobierno de Derecha, pero tiene bastante poder de negociación al formar junto al PRI, un grupo de parlamentarios que pueden inclinar a favor de uno u otro bloque la balanza del poder legislativo. ¿Quiere acaso el PRSD ser un mercenario legislativo, o aliarse con el ganador a fin de conservar una cuota de poder en el gobierno? (¿y tal vez negociar algún Ministro del nuevo Presidente?).
Sea como sea el espectáculo es penoso, muestra falta de integridad y convicción política y peor aún, muestra desorden político, perfilándose como un partido débil y poco confiable.
En fin, hay muchísimas cosas que quisiera comentar, pero creo que ya me excedí demasiado en la extensión de esta serie de artículos que en definitiva no hacen más que permitirme descargar una parte de la frustración que me genera contemplar la vida política de mi país y ver la falta de generosidad con la que se ejercen los cargos públicos.
Creo que habrá quien me diga que me expreso con un alto grado de ingenuidad y probablemente tenga razón, pero no dejo de pensar que un ejercicio más abnegado de los cargos públicos generaría con mayor velocidad los cambios que se necesitan para obtener una mejor calidad de vida para la generalidad de la población y me gustaría cree que hay gente que es capaz de actuar de dicha forma.
En mi próximo artículo pienso publicar algunas ideas que tengo para mejorar algunos servicios públicos, con el único fin de aportar algo y no ser siempre sólo un crítico más. Son ideas simples y ciudadanas, es decir, carentes de estudios especializados que las apoyen o justifiquen (obviamente), pero tal vez sirvan para que alguien las lea y vea si son útiles o no, o al menos para que estimulen mejores ideas en personas que tengan la capacidad de hacer algo al respecto.
El PRSD ha tenido un comportamiento patético.
Parto aclarando que mi comprensión del funcionamiento y pensamiento político del PRSD es inexistente. Sinceramente no entiendo que significa ser un Radical Social Demócrata y qué tipo de pensamiento político une a sus militantes.
El Partido Radical Social Demócrata o PRSD, es un partido pequeño y da la impresión de que querían que el 5º Presidente de la Concertación fuera de su partido, en razón de una lógica simplista de "ahora nos toca a nosotros", que es un poco irrisoria. El pequeño porcentaje de votos con que cuentan y el limitado número de parlamentarios que militan en su partido les ha permitido negociar cuotas de poder en los Gobiernos de la Concertación, pero jamás han tenido poder para golpear la mesa.
No es mi intención ningunear al PRSD porque claramente el accionar de los últimos días no representa el pensamiento de todo el partido, pero se trata de un síntoma claro de una enfermedad mayor que afecta a la coalición en su totalidad... el cuoteo.
Uno quisiera que la meritocracia fuese el factor decisivo para la formación de los equipos políticos de gobierno, pero no lo es y difícilmente llegue a serlo. De afuera pareciera que hay una pugna constante en cuanto a quien ejerce cuál cargo que hasta cierto punto es mezquina y ridícula. Si el Ministro del Interior es de tal o cual partido, ¿se afecta el ejercicio del poder? No. Al menos eso creo, porque se trata de un cargo de confianza del Presidente y se ejerce conforme a sus instrucciones directas, lo que puede variar es la percepción pública del ejercicio del cargo y por tanto se afecta la popularidad de determinado partido, el único efecto práctico es que del ejercicio de dichos cargos surgen figuras políticas que posteriormente pueden aspirar a candidaturas presidenciales. Ahora, si el objetivo es que la coalición gobierne, en teoría debiera dar lo mismo de cuál partido provengan los nombres que ejercen el poder, pero no es así y las sucesivas disputas y envidias que se van generando causan un espectáculo penoso y patético que en buena medida justifica el creciente número de personas que manifiesta desprecio hacia la política.
¿Qué pasó? acaso el PRSD quiso castigar el desaire que le hizo el resto de la coalición con la "primaria" en la que participó su actual presidente (al que se suma otro penoso incidente, con los insultos que Escalona le dirigió a Gómez), o peor aún, ¿quiso el PRSD adquirir protagonismo y peso político inclinando la balanza de poder del Parlamento?. Creo que hay un poco de ambos, el PRSD no tendrá peso específico como oposición a un Gobierno de Derecha, pero tiene bastante poder de negociación al formar junto al PRI, un grupo de parlamentarios que pueden inclinar a favor de uno u otro bloque la balanza del poder legislativo. ¿Quiere acaso el PRSD ser un mercenario legislativo, o aliarse con el ganador a fin de conservar una cuota de poder en el gobierno? (¿y tal vez negociar algún Ministro del nuevo Presidente?).
Sea como sea el espectáculo es penoso, muestra falta de integridad y convicción política y peor aún, muestra desorden político, perfilándose como un partido débil y poco confiable.
En fin, hay muchísimas cosas que quisiera comentar, pero creo que ya me excedí demasiado en la extensión de esta serie de artículos que en definitiva no hacen más que permitirme descargar una parte de la frustración que me genera contemplar la vida política de mi país y ver la falta de generosidad con la que se ejercen los cargos públicos.
Creo que habrá quien me diga que me expreso con un alto grado de ingenuidad y probablemente tenga razón, pero no dejo de pensar que un ejercicio más abnegado de los cargos públicos generaría con mayor velocidad los cambios que se necesitan para obtener una mejor calidad de vida para la generalidad de la población y me gustaría cree que hay gente que es capaz de actuar de dicha forma.
En mi próximo artículo pienso publicar algunas ideas que tengo para mejorar algunos servicios públicos, con el único fin de aportar algo y no ser siempre sólo un crítico más. Son ideas simples y ciudadanas, es decir, carentes de estudios especializados que las apoyen o justifiquen (obviamente), pero tal vez sirvan para que alguien las lea y vea si son útiles o no, o al menos para que estimulen mejores ideas en personas que tengan la capacidad de hacer algo al respecto.
Lo ocurrido con los radicales es un fiel reflejo de lo que esta sucediendo a escala mayor pero camufladamente en la administración Pública: Cambio pega por ideales!!
ResponderBorrarMenos mal que no tengo pega y mis ideales son inconsecuentes.
PD: Apuesto 5 luquitas a que en Enero del 2011 el 85% de la actual adm. pública estará creandosé cuenta en laborum, trabajando, bumeran, etc.
¿Tus ideales son inconsecuentes o intransables? :D jajajajajaja
ResponderBorrarYo me imagino a unos cuantos en la Administración Pública quemando papeles antes de irse, supongo que buena parte de las cosas turbias que pudieron haber ocurrido van a quedar expuestas con el cambio de gente... al menos eso espero.